¿Sabes aparcar en batería?

Lo que más respeto impone al empezar a conducir es aparcar, sobre todo aparcar en batería. Y aunque puede parecer muy difícil conseguir hacerlo correctamente, con cuidado y paciencia podrás aprender a hacerlo sin problemas.

Una de las formas de aparcar que puede que te toque hacer en el examen práctico de conducir es aparcar en batería. Como con cualquier otra maniobra, hay que seguir una serie de pasos para hacerlo con éxito. Hoy te traemos varios consejos para llevar a cabo un aparcamiento en batería sin que sea un proceso muy complicado.

Índice:

Estacionar y poner el freno de mano

Trucos para aparcar en batería

No debes tener miedo cuando piensas en aparcar, porque es un proceso como otro cualquiera, para la que hay que seguir unas indicaciones y tener paciencia. Visualiza esto:

Imagina que en el examen teórico, o una vez con el carnet de conducir, te toca aparcar en batería. Lo primero que debes hacer es buscar un espacio, ya sea en un parking o en una calle donde esté permitido.

Cuando hayas encontrado el espacio donde quieres aparcar, después de señalizar que pretendes iniciar la maniobra, tienes que buscar los puntos o referencias.

Aparte de saber cuáles son tus referencias para empezar a aparcar, tienes que tener paciencia y un buen control sobre los pedales de freno y embrague. Debes meter con soltura las marchas de reverso y primera. Éstas son las que usarás para aparcar.

Teniendo en cuenta estos trucos, y sabiendo meter bien las marchas (primera y marcha atrás), solo necesitarás seguir los pasos que te contamos a continuación, y BOOM, estarás en el aparcamiento con el coche perfectamente estacionado.

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Pasos para aparcar en batería

Vamos a ver el proceso que hay que seguir para aparcar en batería:

  1. Señalizar maniobra: lo primero que tendrás que hacer será señalizar que te dispones a aparcar, usando el intermitente, dependiendo del lado de la vía o el parking donde vayas a aparcar. Es esencial señalizar la maniobra porque los vehículos que vayan detrás de ti deben saber que vas a reducir la marcha y prepararte para aparcar.
  2. Alinear el fin de tu vehículo con la mitad del vehículo aparcado: cuando te hayas puesto en paralelo del espacio donde quieres aparcar, debes alinear el final de tu coche, tu parachoques, con el faro del coche de referencia. Tendrás que tener una buena separación con el otro coche, como mínimo de medio metro.
  3. Ir en reverso girando volante al lado que estacionas: empezarás a meterte en el espacio girando el volante hacia el lado donde quieres aparcar y con la marcha atrás seleccionada. Tienes que dejar el vehículo en un ángulo oblicuo, de manera perpendicular a tu vehículo de referencia.
  4. Observar el aparcamiento por los retrovisores: cuando estés metiéndote marcha atrás en el espacio donde vas a aparcar, deberás que estar mirando por los ambos retrovisores exteriores todo el rato para asegurarte de que no te vas a subir en la acera o darte con ningún obstáculo.
  5. Alinear la rueda trasera con la rueda trasera del vehículo de delate: cuando mirando por el retrovisor derecho veas que la rueda trasera pasa el faro del vehículo de delante, sabrás que ya no te darás con él y podrás seguir adentrándote en el espacio.
  6. Mirar espejo izquierdo para seguir retrocediendo: deberás que retroceder en el espacio observando por el espejo izquierdo, para asegurarte de que no te chocas contra la acera, el automóvil que tienes al lado o cualquier otro obstáculo.
  7. Centrar el vehículo: usando la primera marcha y la marcha atrás alternativamente como lo necesites, deberás centrar el vehículo en el espacio, girando el volante hasta tener las ruedas completamente rectas.
  8. Apagar el coche: cuando te hayas colocado correctamente en el espacio, tendrás que apagar el vehículo, moviendo la palanca de cambios a posición neutra, poniendo el freno de mano y apagando el motor sacando la llave.
  9. Salir del coche: cuando vayas a salir del coche, ten cuidado al abrir las puertas para no golpear el coche de al lado o a algún usuario que esté pasando por la vía. Cuando te hayas cerciorado de que no hay nadie, abre la puerta y una vez la hayas cerrado, bloquea las puertas del vehículo con tu llave.