La importancia de los centros de reconocimiento médico de conductores

Las condiciones físicas, motrices y psicológicas de una persona deben estar en perfecto estado antes de ponerse a los mandos de un vehículo. Por ello es fundamental siempre que se va a obtener una nueva licencia o cuando se tiene que renovar una que ya está en uso acudir a un centro de reconocimiento médico de conductores.

Estos establecimientos deben contar con los permisos pertinentes de las autoridades sanitarias y de tráfico, ya que la expedición de los certificados necesarios para los conductores o futuros conductores no será válida si no se llevan a cabo en centros completamente homologados y en los que se sepa que las pruebas son completamente adecuadas.

Resumen:

• Qué hace un centro de este tipo
• Tipos de pruebas que hay que superar
• Vigencia del certificado

Qué hace un centro de este tipo

Las autoridades de tráfico en colaboración con las sanitarias tienen desde hace años un protocolo de revisión médica que se encarga de declarar si una persona está en condiciones de ponerse a los mandos de un vehículo o, si se da el caso, de detectar problemas que impidan esta misma práctica o al menos la limite.

Las entidades encargadas de aplicar estos protocolos de una forma efectiva son los centros de reconocimiento médico, aunque no todos valen. Para que los certificados emitidos por este tipo de entidades sean válidos, las empresas deberán contar con el visto bueno de las autoridades de tráfico, algo que se debe hacer sometiéndose a un análisis de sus medios y demostrando que sus profesionales están capacitados para cumplir con la misión de estos establecimientos.

Esto obliga a que los centros cuenten con una serie de equipos médicos encargados de medir diferentes aspectos de la salud de los usuarios que se acercan a ellos, aspectos que vamos a ver a continuación.

Tipos de pruebas que hay que superar

Como ya hemos dicho, los encargados de estos centros médicos someterán a los aspirantes a obtener el certificado médico a una serie de pruebas que deberán superar para conseguir la obtención de dicha acreditación. Estas pruebas están reguladas de forma precisa y pretenden abarcar todos los aspectos relativos a la salud que entran en relación directa con la conducción.

En primer lugar, los presentados tendrán que declarar si padecen algún tipo de enfermedad o están tomando tratamientos médicos de algún tipo para que el facultativo estime si estos pueden afectar a su capacidad de conducir. El siguiente paso llevará a los aspirantes a someterse a una prueba de agudeza visual a la que debe acudirse con gafas siempre que estas sean parte de la vida del usuario.

También se someterá al conductor a una prueba auditiva valorando la escala de sonidos que puede detectar a través de un sistema de audio y, por último, el usuario será sometido a una prueba de reflejos a través de algunos de los mecanismos dispuestos para ello. Si se superan todas las pruebas, se recibirá el correspondiente certificado médico.

Vigencia del certificado

En condiciones normales, no hay que preocuparse en absoluto por la vigencia del certificado, ya que su uso suele ser inmediato. No obstante, en caso de duda hay que saber que la validez de este documento es de 90 días, tiempo a partir del cual, si no se ha presentado ante las autoridades de tráfico oportunas, pierde por completo su validez siendo de nuevo obligatorio presentarse al reconocimiento y superarlo.

Los certificados médicos y los procesos para obtenerlos no son gratuitos, aunque su coste depende del centro concreto al que se acuda.