¿Qué es el manual de reformas de vehículos?

La mayoría de los conductores solo piensan en la inspección técnica de vehículos cuando llega la fecha límite de pasar esta revisión; fecha y periodicidad que dependen del tipo de modelo que se conduzca y de la antigüedad del mismo.

Sin embargo, hay ocasiones en las que se hacen determinadas modificaciones en un coche o en cualquier otro vehículo que deben someterse al estudio de la ITV para ser aprobadas. Estas modificaciones son las que recoge el manual de reformas de vehículos, un elemento que vamos a conocer más a fondo.

Resumen:

Estación de ITV

¿Qué reformas recoge el manual de reformas de vehículos?

El citado manual no interviene en ninguna de aquellas reparaciones o cambios de piezas que no afecten de una forma significativa al rendimiento del vehículo. Por si quieres una pista de cuáles son las modificaciones que sí son de importancia, basta con que cojas la tarjeta de la ITV y veas los datos que aparecen en ella. Si alguna reforma del vehículo hace que los datos ahí expuestos se tengan que modificar, el manual entra en juego.

Por regla general y a muy grandes rasgos se puede decir que las modificaciones recogidas en este manual son todas aquellas que modifican valores de la dirección, los frenos, la suspensión, la disposición o el número de ejes, la transmisión, la potencia de la unidad motriz o la identificación del vehículo.

Las citadas modificaciones pueden ser consideradas como las grandes categorías de este manual. Eso sí, dentro de cada una de ellas hay una multitud de aspectos recogidos que son los que el conductor debe tener en cuenta finalmente en caso de hacerlos en su vehículo.

Como ya hemos indicado, la importancia reside en que modificarán aspectos clave de la tarjeta de circulación del vehículo y que los cambios en este documento sólo pueden ser aprobados por las autoridades encargadas de la ITV, por lo que su participación en el proceso es fundamental.

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¿Qué hacer en caso de realizar este tipo de reformas?

Siempre que se acometan modificaciones en un vehículo que cambien los parámetros recogidos en la tarjeta de circulación, el dueño del mismo estará obligado a notificarlas y a homologarlas en un plazo que no debe superar nunca los 15 días desde el fin de la implementación de las reformas y de la nueva puesta en circulación del vehículo.

Pero no basta con notificar los cambios, el usuario deberá someterse a una ITV para que las autoridades determinen si esas reformas son susceptibles de mantenerse. Es lo que se conoce como ITV de reforma, que asegura que los cambios realizados no suponen ningún peligro para el conductor o el resto de usuarios de las vías.

Antes de la inspección, los usuarios también deberán presentar el informe técnico de la reforma.

Las modificaciones realizadas no tienen por qué ser validadas positivamente en la ITV de reforma; si durante la inspección se comprueba que no son seguras o que no se ajustan a la legislación vigente, se emitirá un informe de disconformidad y el dueño del mismo tendrá un plazo de 2 meses para subsanar los aspectos que se hayan señalado en dicho informe.

Por lo tanto, nada asegura la validez y permanencia de las reformas llevadas a cabo en un vehículo, y más cuando afectan a los aspectos esenciales de éste, por lo que lo mejor es siempre ponerse en manos de expertos y contar con el asesoramiento mecánico oportuno a fin de evitar problemas con las autoridades encargadas de revisar las reformas realizadas.