¿Qué revisiones hay que hacer para un buen mantenimiento del coche?

Como conductor, debes llevar un buen mantenimiento de tu coche realizando las revisiones necesarias. Como con cualquier cosa, el vehículo hay que cuidarlo. Eso requiere un buen conocimiento del mantenimiento y las revisiones que hay que hacer. Vamos a ver cuáles son estas revisiones y cuándo hay que hacerlas.

Resumen :

Revisar el nivel del líquido de frenos

Una de las revisiones más importantes que hay que hacer es comprobar el nivel del líquido de frenos. 

Cuando se pisa el pedal del freno, se produce una fuerza que llega a las ruedas a través del sistema de frenado para que se reduzca la velocidad y el vehículo se detenga. El líquido de frenos se encarga de transmitir esta fuerza por el sistema, por eso debe tener el nivel y las propiedades adecuadas. Su densidad, viscosidad y resistencia se debe ajustar a las altas temperaturas del vehículo para poder cumplir su función.

Revisar el líquido de frenos

Para revisar el nivel del líquido de frenos, primero hay que saber dónde se encuentra el depósito del líquido de frenos. Normalmente, está en la parte trasera del motor en el lado del conductor. Se puede identificar porque lleva una tapa con un símbolo con un círculo y dos líneas a los lados que lo cubre. 

Una vez identificado el depósito, el nivel de líquido de frenos se mira usando las marcas de  “máxima“ y “mínima”. El líquido tiene que estar entre las dos marcas. Si no lo está. habrá que rellenar el depósito hasta llegar a superar la marca de “mínima”.

También, como hemos comentando antes, hay que observar que el líquido tiene una viscosidad y densidad específicas. Esto se hace mirando que no esté muy oscuro y observando su temperatura de ebullición. Esta última comprobación se debe hacer en un taller.

formación de conducción
Teórico
online gratuito

Cambiar el aceite del coche

Renovar el aceite lubricante del vehículo es otra de las revisiones periódicas que hay que hacer. Su función es lubricar las piezas interiores del vehículo para que no se produzcan gripajes y el motor deje de funcionar. Este puede perder sus propiedades y no cumplir esta función.

Puedes detectar que hay que revisarlo cuando notes que… 

Si ves que hay que cambiar el aceite, necesitarás estas herramientas: una garrafa de aceite, un filtro de aceite, una llave fija o inglesa, un embudo y, opcionalmente, un tornillo imantado para el cárter.

El primer paso es asegurarte de que tienes apagado el motor y el freno de mano y la primera marcha accionados. Una vez que has hecho eso, debes elevar el vehículo con unas rampas portátiles o un par de gatos para que la parte delantera del vehículo quede hacia arriba. 

Cambiar el aceite

El siguiente paso es deslizarte bajo el coche, una vez que esté bien sujeto, y buscar el tapón de vaciado del aceite en el motor, que estará marcado en el libro de mantenimiento de tu coche. Luego, hay que colocar el recogedor de aceite debajo y desenroscar el tornillo con la llave para que el aceite caiga. Cuando lo hayas vaciado, podrás volver a cerrarlo y deslizarte de nuevo fuera de la parte inferior del coche.

El siguiente paso es cambiar el filtro del aceite, que se hace en el capó del coche en el lugar adecuado. 

Lo último que tienes que hacer es rellenar el depósito de aceite, con la ayuda de un embudo y comprobando que el nivel de aceite sea el indicado en el manual de mantenimiento. 

El nivel de aceite del motor

Al igual que cambiar el aceite cuando haya perdido sus prioridades, debes revisar su nivel con aún más frecuencia. 

El propio vehículo te avisará con la iluminación del indicador luminoso en el testigo de instrumentos.

La revisión se hará con la varilla que está situada en el lateral del motor y siempre con el motor frió y apagado y el vehículo en llano. Para saber que el aceite tiene el nivel correcto, este tiene que estar entre las marcas de máximo y mínimo marcadas en la varilla. 

Si el nivel de aceite no es el adecuado, tendrás que rellenar el depósito para que el nivel esté entre las dos marcas.

formación de conducción
Teórico
online gratuito

Cuando cambiar la correa de distribución

La correa de distribución es un elemento que tienen los motores de combustión que sirve para sincronizar la rotación del cigüeñal y del árbol de levas. Su función es hacer que las válvulas del motor se abran y cierren en el momento adecuado durante el proceso de admisión y escape de cada cilindro. 

Correa de distribución

Este elemento necesita ser sustituido periódicamente para su correcto funcionamiento. Aunque depende del modelo del coche y de los kilómetros recorridos, se recomienda revisar y si es necesario cambiar la correa de distribución entre los 60.000 y 160.000 kilómetros o cada 4 o 6 años.

Cambiar el líquido refrigerante

El líquido refrigerante es uno de los componentes del sistema de refrigeración del vehículo, que se encarga de que el vehículo no se caliente en exceso. También conocido como anticongelante, el líquido ayuda a mantener una temperatura de 90º en el interior del vehículo. 

Al igual que pasa con el aceite, este líquido puede perder sus propiedades con el paso del tiempo y los kilómetros recorridos, por eso hay que revisarlo periódicamente y cambiarlo si es necesario.

Líquido refrigerante

El cambio del líquido de refrigeración se hace con el motor en frío y teniendo en cuenta que siempre hay que desechar el líquido restante en el depósito.

Una vez que se ha vaciado el depósito donde reside el líquido, hay que limpiarlo con agua a presión para que no quede líquido residuo. El siguiente paso a seguir es limpiar también el circuito para lo mismo. 

Después ya se puede rellenar el vaso, o depósito con el nuevo líquido anticongelante, el cual debe estar entre las marcas de máxima y mínima en el depósito.

formación de conducción
Teórico
online gratuito

Correcto reglaje de faros

Tener luces que iluminen la vía y a los otros vehículos con la intensidad necesaria es muy importante, ya que siempre hay que poder ver y ser visto. Los faros del vehículo son las luces que se encienden para cumplir esta función, por lo que tienen que estar bien reglados. Para regular los faros, simplemente hay que ajustar la intensidad y posición de las luces para que se vean con claridad en la vía y creen la luz adecuada para poder ver todo lo que pasa en la vía.

Faros del vehículo