¿Cuáles son los diferentes pedales del coche?

Todo conductor sabe que un coche no solo se controla con las manos. También se hace con los pies, y es aquí donde entran en juego los pedales del coche, un sistema que está pensado para realizar acciones como cambiar de marcha y aumentar o disminuir la velocidad del vehículo.

Usar bien este sistema es fundamental por varios motivos. El primero es la seguridad, y es que hay que saber cuándo frenar o acelerar para hacer una conducción responsable y segura. El segundo es por la eficiencia, y es que un uso inadecuado de los pedales es más que suficiente para que el consumo de combustible se dispare y, por lo tanto, también se genere mayor contaminación.

Resumen :

• El pedal del acelerador
• El pedal del freno
• El pedal de embrague

El pedal del acelerador

Este es el que se encuentra en la parte derecha del sistema. Se trata del pedal que todo conductor debe emplear para aumentar la velocidad del coche y obtener una respuesta potente cuando sea necesario, por lo que tiene una gran importancia.

Realmente, el pedal del acelerador no aumenta la velocidad directamente. Lo que hace es regular el volumen de combustible que entra en el interior del motor y, por lo tanto, aumenta la potencia de la explosión que se produce en él. Esto se traduce en términos de velocidad o de tracción en aquellas marchas cortas en la que lo importante es obtener una respuesta potente.

Hacer un mal uso de este pedal puede ser peligroso. El acelerador no se debe pisar nunca a fondo ni se debe usar de forma brusca. Esto solo dará como resultado un gasto innecesario de combustible y situaciones de riesgo en la carretera, ya que los coches no están hechos para aumentar su velocidad de forma repentina, por lo que podrían incluso darse situaciones de inestabilidad y pérdida de control.

El pedal del freno

Este es el pedal que se sitúa en la parte central del conjunto y también hay que saber usarlo de forma adecuada. Para empezar, el conductor debe saber que el pedal del freno se debe pisar con antelación a la situación que se quiera evitar y que su recorrido es corto, aunque debe ser activado de forma suave para que la frenada sea paulatina y no agresiva.

Los coches actuales incorporan sistemas electrónicos que eliminan peligros como la pérdida de control en casos de frenada brusca y otros similares, por lo que la acción de frenar cada vez requiere de menos pericia del conductor. Eso sí, por las carreteras españolas siguen circulando coches sin ABS ni otras ayudas similares, por lo que el conductor siempre debe saber que el pedal del freno se debe usar con suavidad y con bastante antelación.

El pedal de embrague

Hay que señalar una cosa importante antes de empezar con este pedal: no todos los coches cuentan con embrague, ya que hay cajas de cambio automáticas que no necesitan de este sistema para engranar nuevas marchas. En estos vehículos, el total de pedales se quedaría en dos, el del freno y el del acelerador.

Ahora bien, la mayoría de coches son manuales y sí tienen embrague. Este se emplea para engranar una marcha nueva cuando se está circulando o cuando el coche va a iniciar la marcha. Se debe pisar a fondo e ir soltándose de forma paulatina y suave cuando ya se ha introducido la marcha deseada, ya que su uso brusco podría ocasionar roturas internas en el sistema de embragado y otros problemas como el apagado repentino del motor del coche.