Todo sobre el pronto pago de multas

Muchos buenos conductores reciben multas de tráfico simplemente por un despiste tonto en la carretera o por aparcar donde no debían. Para este tipo de sanciones existe el pronto pago, que consiste en una reducción de la cuantía a pagar cuando se abona con rapidez.

En este artículo hablamos un poquito del pronto pago de multas, para que sepas en qué consiste y cómo aprovecharlo. Eso sí, también tiene alguna desventaja que otra, así que te lo contamos todo en este post.

Índice:

Conductor quejándose por multa

¿Qué es el pronto pago de las multas?

El pronto pago consiste en pagar una multa dentro de un tiempo establecido por la Administración para que el pagador disfrute de un 50% de descuento. Es decir, que si la persona sancionada paga rápido la multa, pagará solo la mitad de ésta.

Una sanción puede venir impuesta tanto por la Dirección General de Tráfico como de alguna administración local o autonómica (es decir, de algún ayuntamiento o Comunidad Autónoma). Para pagar cualquiera de ellas se debe acudir al organismo sancionador.

Cualquier persona puede realizar el pago de una multa en nombre del infractor. Es decir, pagador e infractor no tienen por qué ser la misma persona necesariamente. Hay dos opciones para llevar este trámite a cabo:

  • La persona que paga tiene que ser el representante del infractor, por lo que debe estar registrado en el registro de apoderamientos de la Dirección General de tráfico.
  • El pagador dispone de un documento llamado “Otorgamiento de representación”.
  • En el caso del pago telefónico, el pagador debe tener a mano ambos DNIs, el del infractor y el suyo propio.
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Pros y contras del pronto pago de multas

Tanto para la persona sancionada como para la Administración, la ventaja principal del pronto pago es el ahorro de costes. El conductor se ahorra el 50% de la cuantía, mientras que la Administración se ahorra los costes asociados a la gestión del cobro.

Eso sí, el pronto pago presenta una desventaja: el conductor sancionado que paga la multa está declarándose culpable frente al organismo sancionador, por lo que luego no podrá reclamar nada. Si el conductor no se declara culpable siempre se puede interponer un recurso, pero las alegaciones no suelen ser suficientes para que se retiren las sanciones, por lo que si se alega y se pierde, habrá que pagar el 100% de la cuantía. No hay derecho a reducción del 50% si se ha presentado un recurso ante una multa.

En resumidas cuentas, el pronto pago lo deben hacer los conductores que están seguros de que hicieron algo mal y de que no hay forma de librarse de la multa. Sin embargo, si el conductor no está de acuerdo con la multa, debe ponerse en manos de profesionales que le lleven el caso. Hay seguros de coche que incluyen las reclamaciones, que es un servicio que ayuda a los conductores con el tema de los trámites administrativos cuando ponen un recurso tras una sanción de tráfico.

Agente de policía que pone una multa de tráfico

Periodos para el pago de multas de la DGT

Las multas de la DGT son iguales en todo el país, y las más comunes (hay multas locales o autonómicas). Hay 3 periodos en los que hacer el pago de una multa de la Dirección General de Tráfico:

  • El periodo voluntario. Tras recibir una multa (no solo las de la DGT, también en las de la Comunidad de Madrid, por ejemplo) hay un periodo en el que se te aplicará el descuento del 50% del importe económico. Esta franja suele ser de 20 días.
  • Periodo ordinario. Cuando pasan esos 20 días, empieza el periodo ordinario, que se extiende 25 días más (45 días después de recibir la multa). En esta ventana de tiempo se ha de abonar el 100% de la cuantía.
  • Periodo ejecutivo. Si no se paga la multa durante el periodo ordinario, habrá que pagar un recargo del 20% extra.

La reducción del 50% sirve para varios tipos de multas: por aparcar en zona azul o aparcar en un sitio incorrecto, por dar positivo en tests de alcohol o drogas, por exceso de velocidad, en su día, las relacionadas con el confinamiento de la covid, etc.

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Medios para pagar una multa de la DGT

Hay 4 métodos para proceder al pago una multa de la Dirección General de Tráfico:

  1. Pagar una sanción por internet. Para abonar una multa solo hace falta ir a la web de pago de multas de la DGT y rellenar los datos (si no, se puede escanear el código QR de la multa y los datos saldrán automáticamente). Debes incluir el importe total de la multa, pues el descuento del 50% se hace de manera automática. Si hay una anomalía en el pago de la multa, siempre se puede pedir el reembolso de la misma.
  2. Abonar una sanción por teléfono. Llamando al 060 (o al +34 902 887 060 si estás en el extranjero) se puede abonat una multa mediante los datos de tu tarjeta de crédito.
  3. Pagar una sanción desde la app de miDGT, app en la que se pueden consultar tus multas y realizar el pago de las mismas. Hay que ir al apartado “mis multas” y de ahí a “pendientes”. En cualquier caso las sanciones no aparecen directamente. Tardan un tiempo en aparecer en dicho apartado. En esta app además se pueden pagar todas las sanciones que tengas pendientes de golpe en un solo pago.
  4. Abonar una sanción presencialmente. Las multas se pueden abonar de manera presencial en los siguientes sitios: en sucursales y cajeros de Caixabank, en las oficinas de Correos, en las oficinas de Tráfico (solo para particulares), en la carretera, si los agentes dan el alto tras la infracción.

El pago en efectivo o por tarjeta dependerá de cómo se realice el pago. Los métodos presenciales pueden aceptar el pago en efectivo o no. Además, aunque la DGT no cobra por tramitar la multa, en Correos sí que cobran una tasa.

Ante cualquier anomalía en los pagos (se ha caído el sistema mientras se procesaba el pago, crees que has pagado una multa que no era la tuya, etc.) se puede pedir un reembolso o incluso contactar con un agente que te dirá en qué situación está la multa.

Conductor realizando tramites

Gracias por leer nuestro artículo sobre el pago de las infracciones de tráfico. Recuerda, le puede pasar a cualquier conductor.

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