Línea discontinua: delimitación de carriles

Al margen de las señales verticales y de los agentes que regulan el tráfico, es posible encontrar en la calzada numerosas señales horizontales o marcas viales que dan una información al conductor que le ayudará a estar seguro y a conducir de forma correcta. Una de ellas es la línea discontinua. Ésta es tan normal que no suele haber tramo de calzada que no la tenga, ya que sirve para cosas tan fundamentales como delimitar los carriles de la carretera, aunque su presencia indica otras cosas que vamos a explicar con más detalle.

Índice:

Línea discontinua amarilla

La presencia de la línea discontinua

Como ya hemos indicado, la línea discontinua está presente en la calzada para delimitar los carriles que haya en la vía. De esta forma, habrá tantas de ellas como número de carriles por los que circular. El número mínimo, por lo tanto, será de una línea en las vías de dos carriles, ya que las que delimitan los bordes de la calzada serán siempre líneas continuas.

La línea discontinua se diferencia de la continua en un hecho muy significativo. La continua no se puede rebasar en ningún caso (salvo casos excepcionales), actuando como una señal de prohibición. En cambio, la línea discontinua sí que se puede superar, aunque solo siempre y cuando las condiciones lo permitan y en maniobras muy concretas. Entre éstas van a destacar algunas como el adelantamiento, que se puede llevar a cabo cuando la línea es discontinua. Eso sí, debe realizarse de forma que los conductores sepan que van a estar seguros, lo que implica controlar la acción del resto de usuarios de la vía y saber cuándo es posible rebasar la línea.

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Línea discontinua adosada a una continua

Muchas veces nos encontramos con una línea continua y una discontinua adosadas, separando los dos carriles en vías de doble sentido de la circulación. ¿Qué significa esto?

Significa que los vehículos que circulan por lado de la carretera donde esté la marca discontinua sí que pueden invadir el sentido contrario momentáneamente para adelantar o girar a la izquierda, mientras que los vehículos del sentido de la marcha donde está la marca continua no pueden hacerlo.

Esto es muy común en carreteras interurbanas con curvas, en las que los vehículos en un sentido para la circulación tiene más visibilidad que los del otro el otro. Eso sí, siempre ha de primar el sentido común; pese a que una línea discontinua en tu lado de la carretera te permita adelantar, siempre debes cerciorarte antes de poder hacerlo con total seguridad.