¿Cuáles son los diferentes tipos de semáforos?

El semáforo es una de las señales que regulan la circulación. Son especialmente importantes en zonas con una alta densidad de tráfico en las que otras señales viales no son igual de efectivas, pero... ¿existen diferentes tipos de semáforos? Sí.

Mediante los semáforos la información se transmite por un sistema de colores: rojo y verde, sobretodo. Cuando el semáforo está en rojo, se prohíbe el movimiento a vehículos o viandantes, y cuando está verde, se permite. Esto es muy general, pues hay tipos de semáforos que solo usan el color ámbar o que usan líneas blancas.

Así es, existen diferentes tipos de semáforos en nuestras carreteras. Los hay para distintos vehículos y para peatones, porque recordamos que los viandantes también son usuarios de las vías públicas y por lo tanto también deben respetar las normas y las señales en las intersecciones.

Vamos a ver a continuación los diferentes tipos que se pueden encontrar en las carreteras españolas y qué significa cada uno.

Índice de los tipos de semáforos:

Semáforo en rojo.

El semáforo peatonal

Este tipo de semáforo, el peatonal, es de los más comunes que existen.

Se limita a coordinar el paso de vehículos y viandantes.

A los vehículos les indicará si pueden pasar o no con una luz circular verde o roja, y en algunos casos amarilla fija, que significa que deben detenerse a no ser que ya se encuentren en mitad de la intersección.

Cuando en una intersección hay posibilidad de girar a la izquierda o la derecha, dentro del círculo podrá haber una flecha en verde o en negro con fondo amarillo que te indica que en esa dirección en particular sí puedes continuar, mientras de frente no.

En cuanto a los peatones, la figura que muestra un viandante inmóvil en color rojo obliga a detenerse y esperar. Por su parte, el semáforo en verde para peatones con la luz fija, es el que permite que el viandante se ponga en marcha, lo que se transmite con la figura de un peatón andando. Hay una última posibilidad: que la luz verde parpadee. Esta luz indica que el semáforo está a punto de ponerse en rojo, por lo que el peatón debe darse prisa o esperar al siguiente.

Cabe señalar que algunos de éstos cuentan con un marcador que indica el tiempo que tardará en cerrarse para peatones y abrirse para coches.

Paso peatonal con semáforo

El semáforo peatonal es el más común, y suele funcionar junto a un paso de peatones, como se ve en la foto.

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Semáforos reservados a determinados vehículos

Son semáforos que regulan el paso de un vehículo concreto. Los más comunes son los que cuentan con una silueta de bici, que corta o da paso a este vehículo. Son muy comunes en ciudades donde hay carril bici paralelo a las vías o en ciudades en las que los ciclistas muchas veces olvidan que no dejan de ser conductores y deben obedecer los semáforos normales.

Semáforo bicicleta en verde

Los semáforos inteligentes

Este tipo de semáforos, los inteligentes, existe en zonas en las que se debe priorizar la agilidad del tráfico por ser áreas con poca afluencia de peatones.

De esta forma, para que el semáforo en rojo se active y detenga la circulación, el peatón deberá pulsar un botón para que su luz se ponga verde y la de los coches roja; de lo contrario el semáforo para vehículos seguirá en verde y los peatones no podrán cruzar la vía.

Es un semáforo muy útil para esas franjas horarias en las que apenas hay viandantes, como las madrugadas, ya que así los vehículos no deben parar en vano.

Zona con poca afluencia de peatones

También hay algunos semáforos que se sirven de sondas o de medidores de velocidad para pasar de un estado a otro dependiendo de las circunstancias; porque en realidad, el concepto de semáforo inteligente evoluciona constantemente. Los más novedosos van incluso conectados al paso de cebra inteligente para cerrarse al tráfico cuando se acercan peatones.

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Semáforos con cámara

Este es el tipo de semáforo pensado para controlar el tráfico de una forma más eficiente.

Los semáforos con cámara controlan el comportamiento de los conductores que se aproximan. Así, cuando el semáforo se cierra, si un coche o una motocicleta ignoran la prohibición de avanzar, la cámara tomará una imagen de esta infracción para que se lleven a cabo las medidas disciplinarias oportunas.

Normalmente estos semáforos se encuentran instalados en lugares donde se alcanzan altas velocidades o en los que hay muchas infracciones reiteradas. Además, se notifican con una señal física para que el conductor quede avisado de su presencia.

Las cámaras de este tipo de semáforos también puede ir conectadas a un radar de velocidad. De este modo, la cámara no sirve solo para sancionar a los vehículos que se los saltan cuando están en rojo, sino también a aquellos vehículos que van demasiado rápido cuando están en verde.

Semáforo con cámara.

Semáforo con amarillo intermitente

Además del rojo y el verde, el semáforo para vehículos tiene un tercer color en la inmensa mayoría de casos: el amarillo o ámbar. Cuando el color ámbar está fijo, significa que los vehículos deben detenerse; pero en el caso de los semáforos con amarillo intermitente este color parpadeando sirve para advertir a los conductores de que deben extremar la precaución, ya que les permite continuar pero sin prioridad.

Si el conductor observa una luz amarilla intermitente deberá ceder el paso a vehículos si lo que se abre es un nuevo carril, o a los peatones, si éstos empiezan a cruzar la vía en ese punto.

Semáforo amarillo intermitente.

Hay algunos semáforos que disponen exclusivamente de la luz amarilla parpadeando continuamente. En ese caso, lo tenemos que interpretar como una señal de peligro y debemos estar especialmente atentos.

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Semáforo para tranvía

A parte de los semáforos con el sistema de colores para vehículos, existen también semáforos especiales para tranvías y autobuses de líneas regulares. Estos semáforos tienen una franja blanca iluminada sobre un fondo circular negro y la orientación de la franja indicará una cosa u otra.

¿Qué significa cada configuración?

  • Línea horizontal: prohibido el paso.
  • Líneaa vertical: permite el paso de frente.
  • Línea oblicua hacia la izquierda o derecha: permite el paso a izquierda o derecha.
  • Línea oblicua intermitente: los vehículos que hemos mencionado deben detenerse como si se tratara de una luz amarilla fija.

Semáforos para tranvías y autobuses de línea regular

Semáforos de carril

Son semáforos cuadrados que se encuentran encima de un carril y sólo afectan a los vehículos que van por ese carril en particular. En este caso, la luz no es circular. Tiene una flecha verde que da paso, una flecha amarilla o blanca oblicua mirando hacia abajo que indica que hay que cambiar de carril, o una cruz roja que indica que no se puede circular por ese carril.

Semáforo de carril

Este tipo de semáforos es la clave de los carriles reversibles y del uso de carriles en túneles.

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Semáforo ámbar como reductor de velocidad

Son semáforos asociados a un paso de cebra que se suelen situar en las avenidas de entrada a las ciudades o pueblos. Concretamente se ponen en zonas limitadas a velocidad urbana, pero en las que los vehículos suelen ir demasiado rápido. Su misión es la de forzar a reducir la velocidad.

Funcionan conectados a un radar de velocidad, de modo que permanecerán en color ámbar de manera fija (lo que obliga a detenerse) hasta que el vehículo adapte una velocidad adecuada, momento en que empieza a parpadear, dando paso al vehículo extremando precauciones.

Suelen ir anunciados unos metros antes por un cartel como el de la foto que hemos cogido prestada de Forocoches:

Cartel que anuncia un semáforo reductor de la velocidad

Esperamos que te haya gustado este artículo sobre los diferentes tipos de semáforos que existen.

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