Todo sobre el borde de la vía

En toda carretera se pueden encontrar diversas zonas que los conductores deben tener en cuenta, y cada una de ellas tiene propósitos muy diferentes. Hay algunos elementos más importantes que otros, como es el caso de los arcenes o los carriles.

Justo el límite entre estas dos zonas es lo que se conoce como borde de la vía. En sí misma, es una parte que no tiene una misión concreta, pero que se debe tener en cuenta en determinados momentos por motivos que vamos a ver a continuación.

RESUMEN :

Vehículo circulando por una vía en la que es muy visible el borde

¿Qué es el borde de la vía?

Por el borde de la vía se entiende la zona límite que separa el espacio de la calzada, por el que se puede circular y que está formado por los carriles, y el área que queda fuera de esta, pero que aún sigue perteneciendo a la carretera.

De esta forma, el borde de la vía puede desembocar tanto en un arcén como en el fin de la carretera, en función del tipo de vía por el que se circula. Lo primero, que termine en un arcén, es lo normal en vías rápidas como puede ser una autovía o una autopista. El segundo caso es más común en vías convencionales en las que el arcén no tiene que estar presente de forma obligatoria.

Con todo, siempre se debe tener en cuenta que el fin de la vía es justamente esa parte en la que acaba la zona principal en la que se suele conducir, y en la que empiezan otras a las que se debe recurrir en ocasiones especiales.

En la mayoría de los casos, el fin de la vía está señalizado con una gruesa línea continua que señala que no se debe superar este límite durante la marcha normal.

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El fin de la vía como punto de referencia

Como se apunta, una zona como la del fin de la vía tiene importancia porque marca el límite por el que se debe conducir. Además, también es un lugar en el que hay que prestar atención a otros detalles, ya que es la referencia de varios momentos de la conducción.

Por ejemplo, cuando hay problemas en la marcha, los conductores deben saber que tienen que detenerse y bajarse del vehículo por la zona más cercana al fin de la vía. Es así porque se trata del área más segura de la carretera, ya que es la parte por la que no va a circular ningún vehículo.

También hay otros casos en los que es importante identificar dónde se encuentra el fin de la vía. Sin ir más lejos, cuando hay que realizar una parada de emergencia, esta se debe hacer en el arcén o, si no hay, en el punto más cercano al fin de la vía.

La razón de esto es que así se obstaculiza menos el tránsito de los vehículos que circulan por la vía en cuestión, algo de suma importancia para evitar problemas al resto de usuarios de la vía cuando hay una avería.