Los riesgos de usar teléfono móvil durante la conducción

Los smartphones han servido para poner a los usuarios un buen número de utilidades al alcance de la mano. También durante la conducción, y es que no hay que olvidar que estos dispositivos pueden ayudar en tareas como la de la orientación y otras.

Sin embargo, manipular el smartphone cuando se está conduciendo es algo que los conductores deberían dejar de lado por las consecuencias que tiene, consecuencias que cuestan todos los años muchas vidas en las carreteras y que podrían evitarse fácilmente.

Resumen :

• Las cifras de la DGT
• El peligro del móvil
• Sanciones y usos permitidos

Las cifras de la DGT

La DGT lleva años luchando contra el uso del móvil al volante. Incluso antes de que aparecieran los inteligentes smartphones, las campañas contra acciones como atender llamadas o mandar mensajes eran masivas, algo que se debe a cifras más que preocupantes.

Según una encuesta hecha por la misma Dirección General de Tráfico, son unos 2 millones de conductores los que afirman usar el móvil de forma habitual mientras conducen. De ellos, una buena parte asegura que no pueden dejar de mirar el smartphone mientras están al volante.

Estas cifras desvelan uno de los grandes males en lo que a seguridad vial se refiere. El uso del móvil al volante está detrás de casi 400 muertes anuales en las carreteras españolas, cifras lo suficientemente altas como para tomárselas en serio.

Lo cierto es que los teléfonos ya vienen preparados para evitar estas distracciones. Los smartphones cuentan con un modo coche que debería ser activado siempre que el conductor se ponga a los mandos del vehículo, modo que evita algunas de las distracciones más habituales.

El peligro del móvil

Lo cierto es que los smartphones en sí mismos no son peligrosos. Lo que sí lo es no es otra cosa que la desviación de la atención que se produce cuando se atiende a la pantalla del móvil y no a la carretera.

Aunque sea durante un breve lapso de tiempo, unos segundos solamente, un vehículo puede llegar a recorrer en este tiempo más de 100 metros cuando circula a 120 km/h. Esta distancia no es baja para nada, y es que, de producirse un incidente inesperado, el conductor que esté atento al móvil y no a la carretera no tendrá tiempo de reaccionar debidamente.

Pero, normalmente, el uso del teléfono durante la marcha se alarga durante más tiempo. Algunos estudios han demostrado que una acción como mandar un WhatsApp puede llegar a ocupar al menos 20 segundos, un tiempo en el que la carretera quedará en segundo plano con todo el peligro que ello supone para el conductor y para el resto de usuarios de la vía.

Sanciones y usos permitidos

Debe quedar clara una cosa: el móvil solo puede usarse durante la conducción cuando está en modo manos libres o cuando existe un dispositivo de este tipo al que el smartphone se pueda conectar. Nunca se puede manipular con las manos el teléfono, ya que esto es la fuente principal de los problemas y lo que la DGT sanciona con mayor dureza.

Las cifras son tales que la DGT ha creado sanciones exclusivas para esta distracción más duras que las que se aplican para otras. Así, el uso del móvil está considerado como una infracción muy grave.

Ello supone que la sanción puede llegar a costar 6 puntos del carnet de conducir y una multa económica elevada, y es que las autoridades de tráfico se han propuesto terminar con un problema que cuesta vidas por el simple hecho de distraer la atención de la carretera.