Las luces adaptativas - Funcionamiento y mantenimiento

Los vehículos, sean del tipo que sean, deben tener siempre un sistema de iluminación que les permita circular de noche o cuando las condiciones climáticas así lo precisan.

Sin embargo, no todos los sistemas de iluminación son similares. En los últimos años, se han desarrollado las llamadas luces adaptativas, que aportan una serie de ventajas en comparación con las luces convencionales; ventajas que pueden ser de gran utilidad cuando se está circulando.

Resumen de contenidos:

Luces adaptativos en un vehículo

¿Qué son las luces adaptativas?

A simple vista, el sistema de luces adaptativas parece similar al sistema de luces convencional, ya que está compuesto por los mismos materiales. Las diferencia viene cuando estas luces se ponen en funcionamiento. 

Las luces adaptativas se definen por ser capaces de variar:

  • El caudal de luz
  • La dirección

En los sistemas de luces convencionales, la luz se emite con un haz recto que no se adapta a los movimientos del coche y que, por lo tanto, puede dejar diferentes zonas de la carretera sin iluminar, sobre todo al tomar las curvas. Esto no sucede con las adaptativas; estas luces giran en pequeños ángulos según se mueva el vehículo a voluntad del conductor. Además, dependiendo de la intensidad de la luz ambiente, también pueden modificar la potencia con la que iluminan la carretera.

De esta forma, teniendo en cuenta todo lo anterior, las ventajas del sistema de luces adaptativas son claras:

  • Por un lado, consiguen una máxima eficiencia en la iluminación
  • Por otro, dan oportunidad de evitar las zonas oscuras que pueden convertirse en un problema para los conductores que van circulando por determinadas vías.
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¿Cómo funcionan las luces adaptativas?

Una de las grandes ventajas de este tipo de sistemas es que no hay que hacer absolutamente nada para que la iluminación se lleve a cabo de forma correcta. Los conductores solo tienen que encender el sistema de iluminación como lo harían de forma convencional, y este funcionará de forma automática adaptándose a las condiciones de cada momento.

El sistema funciona a través de una serie de sensores conectados con la dirección del vehículo. Así, las luces saben en todo momento hacia qué dirección hay que dirigir el haz de luz y con qué intensidad; evitando así que puedan quedar zonas oscuras en la carretera. Con ello se mejora enormemente la seguridad durante la conducción.

Hay que tener en cuenta que las zonas oscuras a las que hemos hecho referencia se pueden convertir en un problema, ya que en ellas pueden aparecer peligros que pasarán desapercibidos para el conductor, algo que el sistema de luces adaptativas elimina por completo.

Coche con luces LED

Mantenimiento de las luces adaptativas

Realmente, el mantenimiento del sistema adaptativo de iluminación no exige nada en particular por parte del conductor.

Los sensores y pequeñas piezas que permiten el movimiento de los faros se deben reparar en caso de avería, pero eso es algo que los mecánicos tienen que llevar a cabo.

En caso de que se fundan algunas de las lámparas que este tipo de sistema de iluminación lleva en su interior, se podrán sustituir por otras similares. Esto se lleva a cabo de la misma manera que como se haría en un coche o en cualquier otro vehículo que no contase con faros adaptativos, por lo que no hay mayores problemas para llevar a cabo estas tareas.