¿Qué debes saber sobre el pedal de freno?
El pedal de freno es el primer elemento del sistema de frenos de un vehículo que está en contacto con el conductor y que controla o activa el resto de dispositivos de un sistema fundamental para la seguridad en la marcha.
El pedal de freno se encuentra situado en la zona central debajo del volante dejando al acelerador a su derecha y al embrague a su izquierda. Por su forma, es el pedal de más fácil acceso, algo pensado para evitar problemas a la hora de tener que hacer una frenada brusca de emergencia.
Resumen:
- Funcionamiento del pedal del freno
- Consejos para manejar el pedal del freno
- Problemas con el pedal del freno
Funcionamiento del pedal del freno
Dicho de una forma muy simple, cuando se pisa el pedal del freno el coche, lógicamente, éste reduce su velocidad hasta detenerse. Pero esta explicación se queda solo en la superficie del mecanismo que acciona este pedal, por lo que conviene repasar más a fondo sus peculiaridades para comprender mejor su funcionamiento.
Cuando el piloto pisa este pedal, una pieza interna rota sobre sí misma activando un segundo componente conocido como servofreno. A su vez, este conjunto va unido a unas varillas hidráulicas que llegan directamente a la bomba de frenado en la que se encuentra un émbolo que será movido por acción de la presión que se ha ejercido sobre el pedal.
Una vez que se levanta el pie del mismo, la misma presión del émbolo de la bomba hace que el pedal del freno recupere su posición original desactivando la acción de frenado. Esto es fundamental, ya que en caso contrario se quedaría el pedal en su posición activa impidiendo que el vehículo prosiguiera la marcha.
Consejos para manejar el pedal del freno
Conocer su funcionamiento interno no implica en absoluto que se haga un uso responsable del freno. El conductor debería saber que este pedal puede generar problemas en la marcha si no se emplea de forma correcta y que incluso es posible dañar los diferentes componentes del sistema de frenado si no se lleva a cabo un uso responsable del mismo pedal.
El pedal del freno es uno de los más duros y de menor recorrido de los tres pedales que se montan en los vehículos. El motivo es que es muy sensible y en caso de emergencia debe activarse por completo sin que haya un recorrido demasiado grande que pueda hacer que se pierda un tiempo precioso a la hora de evitar problemas.
Así, todas las marcas fabricantes indican que la forma correcta de usar el freno en condiciones normales es pisando el pedal de forma suave y progresiva, lo que evitará que se produzcan frenazos bruscos peligrosos para el sistema en su conjunto y para la seguridad de la marcha.
Problemas con el pedal del freno
En ocasiones, especialmente en coches que tengan ya unos años, el conductor detectará que el pedal del freno tiene un tacto no común que transmite sensaciones de esponjosidad o de endeblez. Como hemos dicho antes, este es uno de los pedales más duros al tacto, por lo que advertir cualquiera de los problemas que hemos dicho antes significará que el estado del freno no es óptimo.
Lo que revela un tacto irregular del pedal del freno es en la mayoría de las ocasiones una fuga en el interior del sistema hidráulico que une el pedal a la bomba y al resto del sistema de freno. Hay que recordar que el pedal vuelve a su posición original por la bomba de freno cuando no se usa, por lo que cualquier problema en estos componentes se reflejará en el pedal.